Nocturno crisantemo blanco
Otro invierno que parte
ya solo somos lejanía
Y aunque queda una fecha fría
te siento florecer sin casi agonía
Tan bella sería la noche a tu vera
Sigo a la espera
-tonta espera-
de que algún verso te traiga
y así palpar otra vez tu magia
Qué inútil creencia
pensar que alguna rima alce vuelo
te susurre mi quererte tanto
y vuelvas con mi quebrado canto
Inútil esperanzarse
con el vuelo de palomas
de alas amputadas
de cantos anudados al cuello
Quizá el problema son los ojos
incapaces de verte
y al final tenías razón
y sos tanto que no sos nada que pueda ver
Duele tanto seguir caminando
sin tu dulzura ablandando el porvenir
sin ese verdor esparcido en la pradera
sin tu voz que me serena
sin saber si alguna vez vas a volver a venir
duele tanto seguir
Seguir,
seguir abrazando la esperanza
la espera danzando con los recuerdos
en este jardín de pensamientos blancos
y tulipanes silenciosos
Seguir rumiando preguntas
y cómo sería recibir la primavera
viéndote renacer en plena helada
y cómo sería despedir el invierno
brindando por tu florecer otro vez
y dónde estarás ahora
entregando tus pétalos desatados al viento
y qué lluvia ahogará tus pesares
enterrándolos en el barro
Nocturno crisantemo blanco
encuentra de nuevo tus manos
sigue pintando tu alma de tinta
en alguna pared olvidada
que quizá no merezca tu eternidad
pero la abrace con su calma
Solitaria peonia blanca
seguiré recorriendo senderos
dejándote pedazos de mi alma
esperando volver a escuchar tus versos
y que rompan esta silenciosa helada
deteniendo otra vez este reloj de caballos cansados
Querida blanca flor, espero sigas floreciendo otro año y que algún viento me traiga de vuelta tu aroma.
Comentarios
Publicar un comentario